Magdalenas con chocolate

"...No hay sábado sin sol, ni mocita sin amor..."

...el mío, por las magdalenas recién hechas.

Ayer tuve un día de esos agotadores, fin de trimestre en el cole, con todo lo que eso conlleva, chocolatada, doble función navideña, padres paparazzis, madres con la lagrimilla saltona de orgullo, y yo... la maestra, destrozada, pero feliz de ver lo bien que lo hicieron mis peques. Después de eso, comidita con los compis, y cuando llegué a casa estaba tan cansada que me duché y me quedé sopa en el sofá a las 20:00, consecuencia: esta mañana a las 7:00 tenía los ojos como platos, y he pensado (malo, porque eso siempre termina con la cocina hecha un asco) ¿Porqué no hago unas magdalenas de chocolate para desayunar? Pues eso, que son las 10 y ya me he zampado dos con un té calentito, la primera estaba todavía caliente, luego me dolerá la tripa, pero... no me he podido aguantar.

El caso, que estaba desayunando y mi gatita quería salir al patio, y cuando le he abierto la puerta y he visto el día, he pensado en eso de: "...no hay sábado sin sol, ni mocita sin amor...". El cielo está azul, no veía el sol desde hace una semana, hoy va a ser un sábado genial!!

Para empezar este sábado os dejo la receta:

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INGREDIENTES:

4 huevos.

200 gr. de azúcar.

180 gr. de aceite de oliva (sabor suave) en su defecto de girasol o maíz , pero mucho mejor si es de oliva.

220 gr. de harina de repostería.

1 pizca de sal.

1 sobre de levadura.

La ralladura de una naranja mediana.

El zumo de esa misma naranja.

Lágrimas de chocolate, la cantidad al gusto, el mío?: Muchas jajaja.

PREPARACIÓN :

Ponemos los huevos en un bol, junto con el zumo de naranja, la ralladura y el azúcar, y batimos con la batidora de varillas, la KA, o la TMX, hasta que triplique su volumen, más o menos. Se nota que ya está lista porque cambia de color.

Encendemos el horno y precalentamos, calor arriba y abajo, temperatura 250 grados. Después bajaremos a 220 grados cuando introduzcamos las magdalenas.

A continuación añadimos el aceite y mezclamos a velocidad baja durante 5 segundos, si no, la mezcla pierde el volumen alcanzado.

Ahora añadimos la harina tamizada mezclada con la levadura y la sal, y volvemos a mezclar, suavemente, y el tiempo justo para que la harina se integre sin que la mezcla decaiga.

Ponemos el chocolate, como os he dicho, al gusto, yo prefiero el chocolate negro, ñammmmm.

Rellenamos las cápsulas, yo lo hago con manga pastelera, me resulta mucho más cómodo y limpio, si lo intento de otra manera lo pongo todo perdido, pero eso ya... "cada maestrillo tiene su librillo". Las cápsulas las lleno hasta que falta un dedo de su capacidad, y una vez que están llenas se espolvorean con azúcar.

Ahora bajamos el horno y metemos la bandeja unos 12 o 15 minutos aproximadamente. Yo, para asegurarme cuando veo que tienen buen color, pincho una y si el palo sale limpio, las saco.

Se dejan en la bandeja 3 minutos y después se pasan a una rejilla para que se enfríen completamente, si no las sacas del molde el papel se humedece y se despega, y se quedan más feillas, así que atención con esto.

Y.... Ya está!! Más fácil imposible, además si se guardan en un recipiente bien cerrado (una vez completamente frías) duran varios días igual de tiernas y deliciosas.

Espero que os animéis a prepararlas.

Besitos.

B.